★ AMSTRAD CPC ★ GAMESLIST ★ PRINCE OF PERSIA (c) MICROIDS/BRODERBUND/DOMARK ★ |
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La princesa está triste. ¿Qué tendrá la princesa?. Pues nada, lo típico, que la han encerrado en lo alto de una torre y que el malo de la película quiere hacerla su esposa a la fuerza. Si hubiese venido antes a este picaro mundo, el argumento de este juego me traería nostálgicos recuerdos de viejas películas mudas con Valentino, Fairbanks Jr... Si aquellos héroes de los que se enamoraron nuestras abuelas y que se pasaban la vida rescatando hermosas doncellas de las garras del malvado hubiesen nacido en los sesenta, seguramente habrían prestado su rostro y su nombre para la carátula de este juego. ¡Pero ya no se hacen películas como las de antes... (suspiro)!. La nuestra es la generación de la hamburguesa, del telefax y de la violencia en el fútbol. ¿Dónde queda espacio para el romanticismo y para las bellas historias de amor?. Pues muy sencillo, en nuestros ordenadores personales. ¿Que no?. ¿Es que no os resulta conocido el tema chico-busca-chica en la mayoría de los videojuegos?. Pues ya está. Erase una vez... Prince of Persia nos traslada al Oriente Medio en una época en que el petróleo se consideraba como una especie de barro sucio y pegajoso. De todas formas la gente no era inmensamente feliz ni mucho menos porque, aunque no había armas químicas ni porquerías de ese estilo, ya hacía mucho que se habían inventado las guerras. Precisamente, el Sultán Imir Iffic se encontraba guerreando en el extranjero y había dejado a su hija, la Princesa, sólita en el palacio. El gran error del Sultán fue dejar como regente ensu ausencia al Gran Visir Jaffar, pérfido y ruin donde los haya. No había hecho el Sultán más que despedirse cuando el malvado Jaffar agarró a la pobre Princesita de los pelos, así por las buenas, y la arrojó sin ningún miramiento a la mazmorra de la Torre de las Lamentaciones. -"¿Te casarás conmigo?" -"¡Jamás!" -"Muy bien. Unas cuantas semanas a pan y agua te harán cambiar de parecer. Y cuando te conviertas en mi esposa yo seré el nuevo Sultán" Pobre chica. Menos mal que en aquellos momentos te encontrabas tú, intrépido aventurero, merodeando por aquella zona y no por casualidad, la verdad sea dicha. Recuerdas aún cuando la viste por primera vez ¿verdad?. Fue en la India, hace apenas dos meses, cuando entraste precipitadamente por la ventana de su habitación huyendo de la guardia real por razones que no vienen al caso. ¿Recuerdas su bello rostro, sus ojos azules, sus hermosos labios...?. Entonces no sabías quién era ella pero lo que pronto adivinaste es que a partir de aquel momento sería la dueña de tu corazón. ¡Vaya susto que se llevó y qué dulce fue su sonrisa cuando le contaste, tartamudeando, el motivo de tu inesperada y escandalosa irrupción!. ¿Recuerdas cómo te ocultó de ios guardias que te perseguían y cómo prometió no contar a nadie todo lo que allí había sucedido?. Sabías bien que haber visto su rostro sin el velo te llevaría a la muerte si llegase a saberse. ¡Qué bello gesto!. "Este será nuestro secreto. Espero que nos volvamos a ver" dijo ella cuando escapabas sigilosamente por la ventana. ¡Y ahora corre el rumor de que ella, la hija del Sultán, ha sido secuestrada por el Gran Visir!. ¡Qué osadía!. Pues nada, a rescatarla tocan.
En las escenas de lucha debemos desenfundar rápidamente la espada, de lo contrario podemos perder todas las vidas. (CPC) El juego Prince of Persia sería la típica vi-deoaventura con pequeños elementos de arcade si no fuera por un punto muy, pero que muy destacable quemerece especial atención: el movimiento. Efectivamente, las secuencias de animación son numérosísimas y muy bien estudiadas. Contemplar el salto del protagonista, cómo trepa a un nivel superior, cómo corre, frena o se agacha es un espectáculo que merece la pena. Pocos juegos (por no decir que ninguno) hemos visto para CPC con esta calidad de movimiento. Los gráficos están en MODE 0 y las pantallas son todas muy parecidas. Podría pensarse que entre la cantidad de secuencias de movimiento (que deben ocupar bastante memoria) y la monotonía de las pantallas, el resultado final sería un juego mediocre en cuanto a adicción. Pero la verdad es que resulta bastante entretenido jugar con este Prince of Persia. La interesante opción de poder cargar partidas sin tener que comenzar siempre desde el nivel 1 ayuda a no cansarse del juego y a mantener un nivel de adicción bastante adecuado. El juego consiste en ir avanzando por las distintas estancias del palacio hasta llegar a la Princesa. La mayoría de las veces tendremos que usar la inteligencia y obrar con cautela más que con velocidad y reflejos. La sensación de realidad es completa, tanto por el estupendo y ya comentado movimiento como por los efectos de las trampas y caídas en nuestro personaje. Así, una caída desde lo más alto nos produce la muerte, desde una altura menor gasta un poco de energía y desde un lugar relativamente bajo sólo nos hace agacharnos según el lógico efecto de la gravedad. En nuestro deambular por los pasillos encontraremos útiles pociones rojas que recargan la fuerza vital y venenosas pócimas azules, así como una útil espada. Otras jarras rojas y verdes nos proporcionarán ciertas ventajas, pero son difíciles de encontrar. Y ya, para terminar, un par de consejos:
David Burgos Prieto |
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